lunes, 23 de marzo de 2009

Reportaje publicado en El Socialista nro. 129

“El Frente de Izquierda es urgente y necesario”
Castillo es profesor de la UBA, economista del EDI y dirigente nacional de Izquierda Socialista. Fue candidato en distintos frentes de izquierda conformados en Capital. Lo entrevistamos. Esto nos dijo.

El Socialista: Cristina justificó el adelantamiento de las elecciones diciendo que el mundo se cae a pedazos...
José Castillo: ¡Se dio cuenta ahora! ¿En qué quedaron sus palabras de hace seis meses asegurando que la crisis no nos iba a afectar? ¿Se acuerdan cuando decían que estábamos “blindados” contra la crisis? Es obvio que la crisis mundial ya está pegando en el país. Lo único que le interesa al gobierno es sufrir la menor pérdida de votos posibles.
E.S.: Adelantan no para combatir la crisis…
J.C.:No piensan hacer nada para evitar que la crisis les pegue a los trabajadores. Es más, quieren pasar “cuanto antes” las elecciones para después tener manos libres para tomar medidas antipopulares. Van a seguir aumentando las tarifas y el festival de subsidios para las privatizadas. Están jugados a que los salarios pierdan frente a la inflación. Y no van a hacer nada para evitar que aumente el desempleo.
E.S.:¿Qué medidas harían falta?
J.C.:Reconociendo la crisis, lo que corresponde es discutir quién la va a pagar. Los empresarios hicieron ganancias millonarias en estos años, mientras los trabajadores ni siquiera recuperaron el poder adquisitivo perdido en la crisis de 2001.El desempleo nunca bajó del 10%. Entonces la crisis la tienen que pagar los que ganaron. Y hay que empezar por lo básico: prohibir por ley los despidos y suspensiones y repartir las horas de trabajo sin afectar el salario de los trabajadores. Por eso hemos presentado, con nuestra diputada Liliana Olivero, un proyecto de ley en la Legislatura de la Provincia de Córdoba, que debería no sólo ser aprobado ahí, sino también a escala nacional.
Esta tendría que ser la primera medida de emergencia ante la crisis que, obviamente, debe complementarse con medidas reales de ruptura con el imperialismo y los grandes monopolios, empezando por dejar de pagar la deuda externa.
E.S.: Cristina critica pero sigue pagando una deuda que beneficia a los banqueros que provocaron la crisis…
J.C.:Los Kichner tienen el triste récord de ser los gobernantes que más deuda externa pagaron en efectivo. Y ahora se viene lo peor. Van a volver a tomar créditos del FMI y a reconocer la deuda a los bonistas que se habían quedado afuera del canje de 2006. Y, lo que es realmente vergonzoso, van a seguir vaciando la caja del Anses, que pertenece a los jubilados, para seguirle pagándole a los banqueros.
E.S.:¿Y la oposición? Porque el primero que adelantó las elecciones fue Macri…

J.C.:Los partidos patronales de la oposición hacen declaraciones críticas altisonantes. Es obvio, ven la debilidad del gobierno y saben que es negocio posar de opositores “duros”. Pero no tiene un programa alternativo. Muchos menos un programa a favor de la clase trabajadora. Miremos como reaccionaron ante la estatización de las AFJP, o cuando el gobierno amenazó, falsamente, con “nacionalizar el comercio exterior”. La postura del PRO, el ARI, el radicalismo o el peronismo “disidente” fue ponerse en defensa irrestricta de los empresarios y de los “derechos de propiedad”.
E.S.:Dado esto, ¿qué le decís a quienes dicen “Kirchner no, pero ojo con la centroderecha de Macri o Carrió”?
J.C.:Que es la trampa con la que el gobierno quiere rescatar “algunos votos”. Pasó recientemente en Catamarca, cuando, con ese argumento, hasta el PC pretendía hacer creer que era de “izquierda” votar al engendro que unía a los Kirchner con Saadi y Barrionuevo. Yo entiendo a muchos compañeros que nos dicen que ya no se creen más el doble discurso de Cristina, que no la van a votar, pero que a la vez se asquean de lo que aparece como oposición. Por eso hoy, más que nunca, la izquierda tiene que ser capaz de presentar una alternativa.
E.S.:Pero la izquierda sigue dividida.
J.C.:Mucha veces, es cierto, por sectarismo, autoproclamación u oportunismo, primó la división. El año pasado, inclusive, las diferencias se ahondaron por diferentes posicionamientos ante el conflicto agrario. Incluso cuando el conflicto había terminado, hubo quienes siguieron haciendo eje en esas diferencias y ahondaron la división. Pero, al mismo tiempo, la izquierda aparece unida en un montón de luchas obreras, nos encontramos juntos en cada conflicto. Y, pese a las diferencias, incluso somos capaces de acordar programas comunes. Así lo demostramos el último 20 de diciembre y ahora lo volvimos a hacer para este 24 de marzo.
E.S.:¿Izquierda Socialista llama a un frente?
J.C.:Rotundamente sí. Estamos absolutamente convencidos que sería un gran paso adelante. Es el reclamo permanente de miles de luchadores que nos reclaman “que la izquierda se una” y no entienden por qué, si estamos todos juntos en las luchas, después aparecemos divididos en las elecciones.
Queremos conformar un Frente de Izquierda. Y no es un llamado formal. Nuestro partido cuando dice algo es para llevarlo adelante. Así lo hicimos en 2007: hicimos frentes con todas las fuerzas de izquierda que estuvieran dispuestas a hacerlo.
E.S.: ¿A quién va dirigido el llamado?
J.C.:Llamamos concretamente al MST, al Partido Obrero, al PTS, y al resto de las fuerzas de izquierda. Sabemos que el MST está lanzado a una campaña autoproclamatoria de sus propios candidatos y sólo parece interesado en acuerdos con la centroizquierda. Nos parece un error muy serio y lo llamamos a cambiar y sumarse a un frente de izquierda. Con el Partido Obrero ha sido siempre difícil avanzar, porque termina priorizando “su” construcción individual. Pero tenemos el ejemplo de Córdoba en 2007, cuando juntos conformamos el FIT. Los llamamos a repetir, ahora a escala nacional, esa experiencia. Con el PTS y el Mas también tenemos el antecedente, a nuestro juicio altamente positivo, del Frente que formamos para las elecciones presidenciales de 2007. Esto demuestra que si hay voluntad y priman realmente las necesidades de los trabajadores en lucha por sobre las mezquindades individuales, es posible realizarlo. Más aún, hoy el Frente de Izquierda es urgente y necesario.

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